Yemen se encuentra sumida en una trágica crisis humanitaria. El conflicto en curso que comenzó en 2015 ha tenido un efecto devastador sobre la población, con brotes de enfermedades epidémicas debidos a la destrucción de la infraestructura, especialmente las frágiles estructuras sanitarias, el pobre saneamiento y el embargo impuesto sobre el país.
El cierre de las fronteras de Yemen ha interrumpido la entrega de suministros vitales para 27 millones de personas vulnerables, resultando en un estallido de muertes de hambre concentradas en los niños y los mayores. 130 niños mueren a diario en Yemen debido al hambre y las enfermedades extremas. Como informa la periodista Iona Craig, hay comida en los mercados pero no es asequible para los yemeníes porque los salarios gubernamentales no han sido pagados durante un año. Por encima de todo, la ayuda humanitaria que llega al país, de la que depende el 75% de la población, está bloqueada por un bloqueo saudí.
Además, el portal de noticias «The New Arab» informa que el cólera está asumiendo las proporciones de una grave epidemia. La crisis de cólera en Yemen ya ha batido el récord de casos conocidos en un solo brote en la historia reciente, y apunta a infectar a más de un millón de personas hasta Navidad – incluyendo a más de 60.000 niños – según informaba Save the Children este miércoles.
El Observatorio Mundial de la Salud de la Organización Mundial de la Salud dice que la enfermedad se ha extendido más rápido que ningún caso conocido de cólera y ahora es el mayor en la historia moderna. La OMS informa de 815.314 casos de la enfermedad en Yemen hasta el 10 de octubre, junto a 2.156 muertes, desde el 27 de abril.
La parte más triste de la historia es la pobre cobertura mediática de esta crisis humanitaria masiva, tal vez debido a que los ricos países del golfo están en un bando de este conflicto. Armados por países occidentales como el Reino Unido y EE. UU., están destrozando Yemen y la respuesta del mundo es un silencio absoluto. ¿Puede ser que los lucrativos acuerdos armamentísticos hayan ensordecido a Occidente ante los gritos de angustia de la población yemení?
Alexis es economista y miembro del DSC-Atenas.
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