Nos hacemos cargo de que los europeos han perdido la confianza en sus representantes políticos – ¡y tienen razón!
Para devolver el poder al pueblo de Europa, concebimos nuevas capas de democracia deliberativa. A nivel local, consejos de deliberación democrática compuestos por residentes seleccionados aleatoriamente complementarán las instituciones representativas del gobierno. A nivel paneuropeo, DiEM25 está comprometido con una serie de asambleas constitucionales del pueblo, con el mismo principio de consejos de deliberación democrática, que forjaran una constitución democrática de la República Europea. Esta Europa será:
- Democrática, en la que toda autoridad política tiene su origen en los pueblos soberanos de Europa.
- Social, que valora no sólo el derecho a no sufrir injerencias, pero también el ingreso básico, los cuidados y bienes que vuelven la persona libre de la necesidad y de la explotación.
- Descentralizada, que usa el poder central para optimizar la democracia en los pueblos, las ciudades, las regiones, y los estados.
- Transparente, en la que la toma de decisión tiene lugar bajo el escrutinio de los ciudadanos.
- Honesta, que busca un futuro prometedor sin eludir su pasado imperialista.
- Pacífica, que reduzca la intensidad de las tensiones en sus zonas del Este, del Mediterráneo, y del Egeo, que acabe con sus proyectos coloniales en el Oriente Medio, en África, y en el resto del mundo, además de servir de bastión contra la tentación del militarismo y del expansionismo por todas partes.
- Abierta, viva y atractiva para las ideas, la gente, y la inspiración del mundo entero, que reconozca las vallas y las fronteras como señales de debilidad que llevan a diseminar la inseguridad en el nombre de la seguridad.
- Liberada, posibilitando que la gente se vean asignados menos papeles estereotipados al nacer, para poder desarrollar su potencial, y ser libres de tener más elección en sus relaciones en todos los aspectos de la vida, del trabajo, y de la sociedad.